lunes, 24 de febrero de 2014

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Tecnología y sentido humano se unen para evitar crímenes en el campus.


Desde la mañana del jueves 20 de febrero se pudo visualizar en los terrenos del campus la nueva adquisición del equipo de seguridad que está proyectada a resguardar el bienestar de nuestro plantel educativo.

Al parecer, las demandas de los polis del campus han sido escuchadas y es que el departamento de seguridad decidió adquirir un moderno diablito motorizado “Segway” gracias al cual los criminales que aterrorizan el tec no tendrán escapatoria.

-Lo compraron principalmente porque últimamente se han reportado muchos robos de lo que viene siendo, ahora si que lo que se dice, pues cubiertos de la cafe; principalmente cucharas, tenedores y uno que otro plato ahh y cuchillos también y cazuelitas de salsa de sushi, por eso te dan tu salsa de sushi en un vaso de café, porqué todo se roban. Ahh y el oxxo también ha reportado robos masivos de lechitas para saborizar café de maquinita, esas son gratis pero igual se las roban los lacras-  Afirmó el policía (al cual no le preguntamos su nombre porque se nos pasó) cuando le dijimos que si nos dejaba dar una vuelta. No nos dejo, pero nos platicó porque lo compraron.

Sin duda, Garzón Garza García está explotando al máximo el modelo Tec21, pues con la nueva joya de seguridad los terroristas robacubiertos del campus no podrán salirse con la suya, ya que por más rápido que corran serán atrapados. La nueva adquisición demuestra que la competitividad internacional, el liderazgo y el sentido humado son pilares incluso en la lucha contra el crimen borreguil organizado.

El único problema es que sólo hay una de estas bestias anticrimen en el campus y por mientras, en lo que ven si funciona o no el nuevo sistema, los policías tienen que rifarse el turno para usarlo disputando un amistoso piedra, papel o tijera. Así que recomendamos que si no acuden a tu llamado cuando tocas el timbre del ascensor de CEDETEC tengas paciencia ya que muy probablemente sea porque están en una contienda por las llaves del Segway.

-No es justo porque siempre pierdo y nunca me toca- Nos dijo otro poli que vimos triste mientras contemplaba la radioactividad del lago de arquitectura.


Por otra parte, algunos alumnos opinan que el robo de cubiertos es un mito y que la compra del Segway se dio para evitar que los polis se cansen mientras corretean a los perros que entran clandestinamente al campus.