El alumnado se congregó en los puntos de reunión del campus a una velocidad proporcional a la magnitud del temblor, la cual no fue nada impresionante. Ésto le dio la oportunidad a gran parte de los presentes de cerciorarse de que, en efecto, había juegos preparados para el día tec. También estaba lloviendo.
Después del muy ligero susto, los alumnos regresaron a sus actividades frenéticas por salvar al semestre después de cuatro meses de mediocridad y letanía.
"Como si uno no tuviera nada que hacer" declaró la alumna Mariah Matsukashi, mientras regresaba a la biblioteca sosteniendo la guía para realizar su entrega final de Administración avanzada para periódicos ilegales.
Aún no se sabe si el temblor fue causado por un roce de las placas tectónicas, o por la fuerza de las calificaciones de todos cayendo al suelo.
